jueves, noviembre 15, 2007

Spuistraat!



El doceavo dia del crepusculo con fiebre...
La princesita muda se robo el surrealismo,
creo un poema con ratones mientras bebia oporto...
Se instalo en un tren-silencio-puerta,
se escabullo en una fiesta de historietas machacadas,
deambulo en el nombre de una cerveza con whiskey.
Inauguro el tiempo, la sonrisa,
las tardes de menta con besos lluviosos..
los soles de vainilla en el plano sepia del absurdo limbo.
Sedujo al cohete donde iba la pestaña 33,
esa reconstituyente del electrocutado fantasma...
El treceavo dia del crepusculo con fiebre...
La princesita ahogo las fotografias en un
un reloj sin bateria...
se invento el sonido de un mapa sin orillas,
desplego la alucinacion fangosa,
el aterrizaje liquido,
la mutacion del grito...
el catorceavo dia del crepusculo con fiebre,
la princesita pego el insomnio a mis rodillas,
y no pude congelarme,
no pude convalecer...
simplemente me deje absorber un martes..
cuando creia que era un un delirio
cuando supuse que habia diluido el hastio..
La princesita perdio en la esquina esa fiebre temporal,
se le tapono el pararayos,
se le incinero la causa...
No habia que temblar,
no habia que dejar de ser alma!

1 comentario:

Metáfora Espiral dijo...

alma mar amar en marte a mayo
cada ves que entonamos en silencio canta un gallo ¡¡

Un abrazo inmenso de menta en el preciso instante ¡¡