TIEM-POST

La melancolía desvencijada,
el párpado en extinción,
hemos sido mudos, incontables, exiliados, farsantes...
Prefiero angustiarme con la calma de tu grito,
con los eclipses de nuestras palabras,
con tus aguaceros en coma,
con mis interminables canciones...
y he extrañado el aullido,
la luz en las ventanas que a veces saben a tu voz,
el silencio suicida de secretos errantes,
tus impávidos pestañeos y las sonrisas que ya no escucho...
Y he extrañado algunos números
esos que se deletrean con besos,
con nebulosas de sueños amarrados al espacio
que cada vez se nos hace más pequeño...